Cómo convertirse en el marido perfecto (2): Dos nuevas palabras

Por fin viernes… Llegar a casa después de una dura semana, ir a la habitación, quitarse la ropa, dejarla por supuesto encima de la cama porque sabemos que luego va sola al tendedero, ponerse el traje del finde (ya hablaremos de eso), ir al salón, tirarse en el sofá, despatarrarse, mirar a la derecha y decir… ¡¡¡Mari..!!! ¡¡¡Me voy a tomar una cerveza!!!

¡¡¡Toma, toma toma!!! Olé tus “güevos”…. Ahora mira a la izquierda y seguro que ves a tu ropa sucia moverse sola por la casa en dirección al lavadero… Anda que… Mira bien a tu mujer y dime qué ves… A tu mujer cansada de hacer lo mismo que tú y lo único que quiere son TRES COSAS. ¡¡Sí!! Solo eso: que la ABRACES, que le des un BESO y que le digas que la QUIERES. Bueno va… lo dejamos en dos cosas, no sea que te dé un infarto por decirla que la quieres… Venga… Vamos… Que tu mujer no muerde (por ahora)… ¿A que no fue tan difícil? Mírala. ¿No la ves más contenta y feliz? Ale, coge la cerveza que empezamos….

Mi maridín en su tarea del saturday morning :)

En tu casa, como sabrás, tienes unos aparatos llamados pequeños electrodomésticos. ¡Si! Son esos que ves en las tiendas y dices – ¡¡¡Mari…!!! Mira ¡¡600 euracos esta cosa!! Y mientras lo dices te imaginas a tu mujer utilizándolo en casa en ropa interior… y encima vas y se lo regalas el día de su cumpleaños. Y no te llevas una ostia porque está presente su familia… ¡¡¡Ay!!! Mi hombre de Cromañón…

Bueno, pues como te decía. En tu casa tienes un pequeño electrodoméstico, lo has visto, ha pasado por delante de tus narices muchas veces, pegado a tu mujer y hace ruido… se llama…. ¡¡¡ASPIRADOR!!!! ¿Y para qué sirve? Seguro que has visto durante la semana crecer ciertos aliens en las esquinas de tu casa y que por arte de magia desparecen los fines de semana…. ¡¡¡Uuualaaaa!!!

Pues no son aliens. Se los come la ASPIRADORA, y se le suelen llamar… PELUSAS!!!! Pues dicho esto, mañana sábado vas a empezar. Tranquilo. A tu ritmo, por ser el primer día levántate a tu hora, con cuidado, no queremos que sufras un infarto por correr.

Cuando termines de hacer tus cosas, empezamos… Dirígete al lavadero, coge el… ASPIRADOR (bien), ve al lugar más alejado de la casa, deposítalo en el suelo, saca el cable, enchúfalo, respira…. BIEN….BIEN…Tranquilo…

Para empezar te recomiendo música. No se te ocurra poner a Queen. La imagen de un tío con bigote, peluca y minifalda cantando “I want to break free” no nos seduce. Pero podemos poner...déjame que piense… a Mónica Naranjo. Esa sí ¿eh? Cantando “Desatameeeee o apriétame más fuerteeee…” Así da gusto.

Va. Dale al botón de ON. Y empieza a aspirar. Adelante, atrás… adelante, atrás… Fácil verdad. ¡¡¡Anda!!! Si los aliens desaparecen…. Sigue el ritmo, mueve las caderas.. el culillo vaaaa…. Sigue el ritmo…. Y ahora mira hacia atrás…. ¡¡¡Noooo, todavía no, que está tu mujer partiéndose el culo de risa!!! Espera, espera… espera… ¡¡¡Ahora!!! Mira hacia atrás y ¿qué ves? A tu mujer llorando de alegría viendo a su nuevo marido portándose como un campeón. Se acercará, te dará un beso, te dirá – ¡¡¡Ay cómo me pones!!!

Tú sigue…hasta terminar la tarea. Al fin y al cabo con música y bailando tampoco se ha hecho tan pesado. Una vez finalizada, siéntate. Lo has conseguido. No fue tan difícil ¿no? Me alegro.

Como recompensa por un trabajo bien hecho, vas a tener dos premios. El primero es apretar un botón con el dibujo de un cable que tiene el aspirador… ¡¡¡TOMAAA!!! ¡¡¡Si se recoge sólo el cable!!! El botón preferido de los hombres. ¡¡¡Apretar y que todo se recoja solo!!!! Y como segundo premio…. Bueno, eso tendrás que preguntárselo a tu mujer… Quizás te lo dé esta noche :))  ¿Compensa o no compensa?

El Sr. Marqués, maridín

IG: @elsenormarques

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